Para iniciarse en el ciclismo adaptado no es necesario ningún tipo de preparación física previa. Basta con que el participante disponga de un poco de movilidad en hombros o brazos.
El ciclismo es uno de los deportes que más sacrificio y esfuerzo requiere por parte del deportista. El hecho de que el deportista sea una persona con algún tipo de minusvalía, no le resta espectacularidad y emoción al mismo, ya que las marcas y retos conseguidos no tienen nada que envidiar al resto de deportistas
El ciclismo para deportistas discapacitados o «ciclismo adaptado con bicicletas manuales” que se emplean en el ciclismo adaptado son de tres ruedas. Se conducen con las manos, mientras que las piernas van apoyadas cómodamente en un reposapiés. Como cualquier bicicleta moderna, tiene varios piñones que reducen el esfuerzo y proporcionan un mayor rendimiento.
La práctica habitual de este deporte favorece el fortalecimiento de las extremidades superiores, la columna vertebral, y los músculos pectorales y abdominales.
Esta modalidad de ciclismo genera a quien lo practica una gran sensación de libertad de movimientos, ya que permite avanzar más rápido, más lejos, con mayor comodidad y realizando mucho menos esfuerzo que en el manejo de una silla de ruedas.